Durante la temida época de exámenes seguro que has tenido que enfrentarte al eterno debate de ¿es mejor estudiar en casa o en la biblioteca? Esta es una decisión personal que depende de muchos factores. No obstante, te traemos algunas ventajas de cada lugar para ayudarte en tu decisión.
Ventajas de estudiar en la biblioteca
Espacio exclusivo para estudiar
Tu mente asociará la biblioteca como el lugar donde estudias. Esto te ayudará a concentrarte y a separar conceptos. La casa será para ocio o descanso y la biblioteca para estudiar.
Estarás acompañado
La biblioteca te permitirá socializar fácilmente durante los descansos. Además, podrás acudir a tus compañeros para preguntarles tus dudas o intercambiar opiniones. Por ejemplo, podrás aconsejar sobre ese máster que tu amigo no sabe si hacer o no por el precio que tiene. Podrás contarle que Unicaja Banco ofrece a los jóvenes ayudas para la financiación de sus estudios. ¡Así dejaréis de lado las preocupaciones y os centraréis en lo importante!
Ambiente que invita a la concentración
Como todo tu entorno estará en silencio y estudiando, te resultará más fácil concentrarte. Además, hay una serie de prácticas que están prohibidas y que suelen ser las que te distraen. Tales como no poder comer, hablar o tumbarte en un sofá y echar una siesta.
Multitud de recursos
En una biblioteca, y más si es aquella de tu facultad, encontrarás múltiples recursos para consultar. Desde libros especializados, hasta personal o compañeros a los que preguntarles.
Evitarás imprevistos
Es cierto que los imprevistos son difíciles de evitar, pero si puedes buscar un lugar donde puedan ser menos numerosos. Si estás en la biblioteca no tendrás gente de tu familia interrumpiéndote, visitas inesperadas o vecinos haciendo obras.
Ventajas de estudiar en casa
No pierdes tiempo de desplazamiento
Al estudiar en el mismo sitio donde vives, no tendrás que perder tiempo de desplazarte al lugar de estudio. No solo ahorrarás tiempo, también dinero evitando coger coche o transporte público.
No hay horarios
En casa podrás estudiar a la hora que quieras. No tendrás que estar pendiente de si cierran o no la biblioteca. Además, no verás interrumpido tu estudio porque sea un día festivo o fin de semana.
Todo lo que necesitas a tu alcance
No tendrás que ir cargando con todos tus libros ni materiales. Como estarás en casa, podrás coger solo los que vayas necesitando, sin necesidad de llevarlos todos a cuestas. Además, no tendrás que preocuparte si hay o no enchufe para cargar tu portátil o si tienes internet.
No tienes que guardar silencio
A pesar de parecer una desventaja, en según qué personas no lo es. Y es que mucha gente estudia en voz alta, algo impensable en una biblioteca. En casa no tendrás problema por molestar a nadie. Lo mismo pasa si te concentras mejor escuchando música, podrás ponerla sin usar auriculares.
La soledad será tu aliada
No tendrás que compartir el espacio de estudio con desconocidos. Tampoco sufrirás interrupciones cuando te hablen ni tendrás que aguantar sus ruidos.
Comodidad ante todo
Estarás en tu silla, con tu comida a mano y sin preocuparte por tener que arreglarte. Podrás estudiar tumbado en la cama, en pijama y con ventilador o estufa. ¿Qué más se puede pedir?
No obstante, aunque las ventajas de comodidad y sociabilidad puedan ser importantes, no te dejes llevar. No son tu prioridad a la hora de elegir lugar de estudio. Por eso, ha de primar aquel donde mejor te concentres o el que te ayude a estudiar. Eso es lo que más has de tener en cuenta cuando te hagas la pregunta de si es mejor estudiar en casa o en una biblioteca.